El envío de armas a Ucracia durante la guerra ha resultado un negocio muy rentable para los países de Europa del Este. RT recoge que la industria armamentística de esos países está produciendo armas, proyectiles de artillería y otros equipos militares a un ritmo como no se había visto desde la Guerra Fría.

Tanto funcionarios como las empresas están conscientes del gran negocio que resulta el contexto bélico de la región. "Existe una posibilidad real de ingresar a nuevos mercados y aumentar los ingresos por exportaciones en los próximos años", dijo Sebastian Chwalek, director ejecutivo de la compañía de la industria Polish Armaments Group (PGZ).  

Esta empresa fijó la meta de producir mil sistemas portátiles de defensa aérea Piorun en 2023, un 40% más de lo fabricado este año. Este aumento de la producción también ocurre en otras compañías de Polonia, Eslovaquia y la República Checa. 

El viceministro de Defensa checo Tomas Kopecny confirmó que han enviado más de 2 mil millones de dólares en armamento y otros equipamientos, exportaciones que no se registraban desde finales de los años 1980, en plena Guerra Fría. "Más que un buen negocio", señaló. 

Lo cierto es que, más allá de querer "ayudar" a Ucrania en la guerra contra Rusia, estas compañías casi han duplicado sus ingresos del primer semestre con respecto al año anterior. Además de Estados Unidos y Reino Unido, Polonia y República Checa están entre los que más proporcionan armas a Kiev.