El "juego del calamar", popular serie de Netflix, tocó el punto doloroso de Corea del Sur: la pobreza y el enorme endeudamiento de la población.

La carga de la deuda de los hogares de Corea del Sur equivale actualmente a alrededor del 105% del PIB. Este nivel no se encuentra en ningún otro lugar de Asia. Y estas son solo estadísticas sobre préstamos oficiales que no tienen en cuenta los préstamos en la sombra.

El endeudamiento de la población va de la mano de una brecha de ingresos cada vez mayor: el 20% más rico del país tiene 166 veces el patrimonio neto del 20% más pobre, una disparidad que ha aumentado a la mitad desde 2017. Esta situación se ha visto agravada por el aumento del desempleo juvenil, la subida del precio de la vivienda y la pandemia mundial.

• La deuda de los hogares en Corea del Sur ha aumentado drásticamente en los últimos años hasta superar el 100% de su PIB, el más alto de Asia.
• Que la deuda total de los surcoreanos comunes supere el PIB en un 5% significa que incluso si una persona ahorra cada centavo que gana en el transcurso de todo un año, aún no podrá pagar su deuda.

El número de personas con problemas de deudas está creciendo exponencialmente. En respuesta, la Comisión de Servicios Financieros y el Servicio de Supervisión Financiera del país decidieron recientemente evitar que más surcoreanos se endeuden imponiendo límites al número de préstamos a los bancos.

Pero los intentos de frenar los préstamos han llevado a algunas personas a recurrir a prestamistas más caros y arriesgados, llamados “prestamistas tiburones”. Esta elección deja a muchos a merced de los cobradores, ya que el más mínimo cambio en sus circunstancias puede hacer que no paguen.

• Algunos surcoreanos con ingresos mensuales de 700 dólares han accedido a créditos combinados que superan 60 veces esa cifra.
• Las tasas de interés en el circuito informal de préstamos pueden llegar a tener una tasa de interés anual del 311,3%, más de diez veces la cota legal.
• Corea del Sur presenta la tasa de suicidio más alta de los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), y la razón principal son los problemas financieros.