En la jerga electoral estadounidense se conoce como Supermartes el día cuando se realizan un gran número de elecciones primarias y caucus en diversos estados. Este 5 de marzo, un total de 15 estados y un territorio estadounidense participaron en el proceso para elegir a los candidatos presidenciales de los partidos Republicano y Demócrata.
Los estados que participaron en el evento electoral fueron Alabama, Alaska, Arkansas, California, Colorado, Maine, Massachusetts, Minnesota, Carolina del Norte, Oklahoma, Tennessee, Texas, Utah, Vermont, Virginia, además de Samoa Americana, territorio separado en el Pacífico Sur.
Los resultados preliminares de la jornada muestran que:
- El presidente Joe Biden ganó las primarias demócratas en 12 estados y también los caucus del Partido Demócrata en Iowa y Vermont, aunque perdió los caucus en el territorio de Samoa Americana. Aquí Biden perdió inesperadamente frente al poco conocido empresario Jason Palmer, a quien sólo se le permitió figurar como candidato demócrata en estados y territorios concretos.
- El expresidente Donald Trump cosechó otra oleada de victorias en el Supermartes, al imponerse en los caucus y primarias a su principal rival, Nikki Haley, en casi todas partes excepto en el estado de Vermont. Así, Trump obtuvo el martes al menos 617 votos de delegados para la nominación del Partido Republicano, frente a los 23 votos que recibió Haley en el Supermartes.
Ni Trump ni Biden tienen aún garantizada la nominación de su propio partido al final del Supermartes, aunque se acercan a esa línea y es probable que la crucen en nuevas primarias dentro de dos semanas.
Es en las elecciones primarias de cada estado donde se define la posición de los delegados que acudirán a las convenciones nacionales de los partidos Demócrata y Republicano en el verano de 2024, las cuales finalmente confirmarán el candidato presidencial. Un candidato debe obtener la mayoría de votos en dichas convenciones. Los republicanos tienen una marca de 1 215 votos de delegados para su convención del 15 al 18 de julio de 2024, mientras que los demócratas tienen 1 968 votos para su convención del 19 al 22 de agosto de 2024.
Según estimaciones preliminares del New York Times, Biden ha conseguido 1 497 votos de delegados, de los 1 968 necesarios para la nominación demócrata. Del lado republicano, Trump cuenta con 995 votos de delegados de varios estados tras el Supermartes, lo que representa cerca de 70% de los votos necesarios para la nominación republicana y Nikki Haley acumularía 89 votos hasta el momento, lo que habría llevado a que la exdiplomática anunciara formalmente este 6 de marzo, un día después del Supermartes, que pondrá fin a su aspiración por la nominación republicana, lo que le deja el camino libre a Donald Trump.
Qué dicen las encuestas
La popularidad del presidente Biden ha caído a 38% en la última encuesta de Gallup, cerca de su punto más bajo.
La consulta encontró que hay bajas calificaciones para la forma en que Biden está manejando diversos temas, como la guerra en Ucrania y Gaza, donde solo 40% y 30% de los encuestados, respectivamente, aprueban su manejo. En cuanto a la economía, solo 36% aprueba sus esfuerzos para revertir la situación, aunque su aprobación ha aumentado ligeramente desde noviembre.
La inmigración sigue siendo el tema más rechazado, ya que solo 28% de los encuestados aprueba cómo Biden ha manejado el aumento de inmigrantes en la frontera. Los demócratas en general todavía apoyan a Biden en la economía y en su manejo de la guerra en Ucrania, aunque las opiniones sobre la guerra en Gaza y la inmigración son menos favorables entre los demócratas encuestados.
En comparación con el mismo punto en su presidencia, la aprobación del trabajo de Biden es 10 puntos menor que la de Trump en 2020. Durante la última semana de febrero de ese año, 47% de los estadounidenses aprobaban el desempeño del expresidente.
Luego de los resultados del Supermartes y la reciente decisión del Tribunal Supremo de EE.UU. que permite la candidatura del empresario, todo apunta a que en noviembre de 2024 se repetirá el enfrentamiento entre Biden y Trump en la contienda presidencial, dos candidatos geriátricos y cuestionables, uno hundiéndose en el desprestigio a la misma velocidad con la que el otro gana terreno entre republicanos.