Los cargamentos de petróleo que llegan a Asia están aumentando y en enero de este año alcanzaron su nivel más alto en ocho meses, según reseña Reuters. Los mayores adquisidores de la región son China e India —ambos miembros del bloque Brics+—, responsables de que la compra de crudo pasara de 27,03 millones de barriles por día (b/d) en 2023 a 28,57 millones b/d en enero de 2024.
Si bien las importaciones por parte de China fueron ligeramente más bajas en comparación con las registradas en diciembre, siguen estando por encima de lo que compraba en enero de 2023. A principio de este año se registró la llegada de 11,31 millones de b/d, por debajo de las 11,48 millones de diciembre, pero más de 1 millón de b/d por encima a las importaciones de 10,24 millones de b/d de enero de 2023.
Sin duda, esto refleja algo distinto a quienes proyectaban un descenso en la economía china relacionado al comportamiento del mercado inmobiliario. El país asiático es el mayor importador de petróleo del mundo, y desde hace 20 años se ha convertido en un gran impulsor de los mercados emergentes.
Por su parte, India experimenta un fuerte crecimiento económico y en ese contexto importó un volumen récord de crudo en enero. Se estima que este país, el tercer mayor comprador de crudo del mundo y el segundo de Asia, importó un récord de 5,33 millones de b/d en enero, frente a los 4,65 millones de b/d de diciembre, según los datos de seguimiento de buques de LSEG reseñados por Zero hedge. Rusia e Irak, en ese orden, son los mayores proveedores de India.
De acuerdo con el analista Clyde Russell, China aumentó las compras desde octubre para aprovechar los precios más bajos, cuando comenzaron a caer desde el año 2023 a más de 95 dólares el barril en septiembre. Infiere que las refinerías chinas han seguido comprando más petróleo barato.
Rusia también es el mayor proveedor de China. A través de oleoductos y camiones cisterna llegaron a 1,94 millones de b/d en enero, lo que la convierte en el mayor surtidor de crudo, seguida por Arabia Saudita que envió unos 1,68 millones de b/d. No obstante, los despachos desde el reino aumentaron con relación a diciembre si se toman en cuenta los 1,38 millones de b/d que registró ese mes, lo que indica que hay un esfuerzo por recuperar ese mercado.
En líneas generales se advierte que Asia ha tenido un buen desempeño al comienzo de 2024 en las importaciones de crudo, dinámica que probablemente se extienda por el resto del primer trimestre; sin embargo, todo está sujeto a las fluctuaciones de los precios del petróleo.
Otro dato que queda a la vista es que Rusia, a pesar de las sanciones impuestas por Occidente dirigidas a afectar su industria petrolera, sigue jugando un papel estelar en el mercado energético mundial.
En este escenario, el bloque Brics+ estaría configurando un círculo virtuoso en materia hidrocarburífera que le permitiría continuar con su expansión económica al mismo tiempo que va, paulatinamente, desacoplándose de las lógicas occidentales del mercado energético.