Luego de haberse sentado durante cuatro días en una nueva ronda de diálogo y negociaciones, en México, entre el Gobierno Bolivariano y la llamada Plataforma Unitaria de Venezuela, las partes publicaron un comunicado conjunto, donde anuncian la firma de dos acuerdos parciales.

El comunicado dice que "las partes acordaron establecer mecanismos de restauración y consecución de los recursos para atender las necesidades sociales de la población, con especial énfasis en los efectos de la pandemia por COVID-19, incluyendo aquellos provenientes de organismos multilaterales a los que tenga derecho la República".

Asimismo el documento incluye la agenda de la próxima ronda de diálogo en México, a finales de septiembre:

• "Las partes convinieron que el primer punto de discusión de la próxima ronda estará referido al 'Respeto del Estado Constitucional de Derecho'. En particular, se discutirá sobre el sistema de justicia y el respeto a la institucionalidad establecida en la Constitución.
• "También se continuará la discusión referida a la protección de la economía nacional y medidas de protección social al pueblo venezolano, incluyendo los Derechos Especiales de Giro, dispuestos para tal fin por el Fondo Monetario Internacional".

Sin olvidar que las partes avanzaron "en mecanismos de consulta con actores políticos y sociales que sean lo más incluyentes posible".

En cuanto a los acuerdos parciales, el primero consiste en un "acuerdo parcial para la protección social del pueblo venezolano" y tiene seis puntos. Se instalará una Mesa Nacional de Atención Social para abordar las áreas de salud y alimentación para la población en general, así como tendrá prioridad la gestión de la pandemia actual en el país; habrá un "proceso de revisión" del régimen sancionatorio occidental contra Venezuela para lograr que seas "garantizados los recursos para la atención social de Pueblo de Venezuela"; y todo ello tendrá acompañamiento de un mecanismo de verificación y seguimiento del cumplimiento de los acuerdos parciales.

El segundo es un "acuerdo para la ratificación y defensa de la soberanía de Venezuela sobre la Guayana Esequiba", que ratifica que el territorio venezolano históricamente corresponde a lo que antes de la declaración de independencia de 1810 se llamaba Capitanía General de Venezuela y reitera que el Acuerdo de Ginebra de 1966 es el marco jurídico vigente para la controversia limítrofe entre la República Bolivariana y Guyana, y tiene cuatro puntos, siendo los principales: ratificar el derecho de Venezuela a los territorios de la Guayana Esequiba, rechazar el Laudo Arbitral de 1899 y la decisión de la Corte Internacional de Justicia y realizar un nuevo llamado a negociaciones con Guyana de acuerdo al Acuerdo de Ginebra.