El miércoles 15 de noviembre una delegación de Venezuela asistió a una audiencia en la Corte Internacional de Justicia (CIJ). Si bien la participación de la vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, no implica que se reconozca la competencia de esta corte en la disputa territorial por la Guayana Esequiba, el país fijó su posición sobre esta ilegalidad con la que se pretende consolidar un robo.
Sobre la decisión autónoma de la nación de impulsar el referéndum consultivo del próximo 3 de diciembre, la Vicepresidenta dijo que es inadmisible pretender derogar el orden constitucional de Venezuela impidiendo la realización de dicho evento.
En cuanto al despojo territorial que se pretende perpetrar, señaló que Venezuela "ha desarrollado una doctrina desde su posición histórica de no someter a decisión de terceros el arreglo de controversias relacionadas con sus intereses vitales, incluídas la independencia y la integridad territorial".
En ese sentido, refirió que la posición histórica de Venezuela está expresamente contenida en el Acuerdo de Ginebra de 1966, único instrumento jurídico para el logro de una solución práctica y satisfactoria para ambas partes.
La Vicepresidenta dejó entrever que Guyana busca usar la CIJ como instrumento para transgredir el orden internacional y promover el colonialismo judicial, es por ello que el Estado venezolano rechaza la acción temeraria del gobierno guyanés de inmiscuirse en los asuntos internos del país.
Durante la audiencia, argumentó que Guyana no es una víctima sino un victimario del Derecho Internacional. Contrario a la imagen colonial que pretenden proyectar sobre Venezuela, dijo que el Gobierno Bolivariano ha puesto en marcha diversas iniciativas para apoyar el desarrollo de los pueblos del Caribe, de las cuales Guyana se ha beneficiado.
Por otra parte, declaró que dicho Estado abandonó el Acuerdo de Ginebra desde que ExxonMobil descubrió enormes reservas de petróleo en aguas del territorio por delimitar, lo que también coincide con la declaración de Venezuela como una amenaza inusual y extraordinaria por parte de Estados Unidos en 2015. A esto se suma el hecho de que Guyana se ha venido convirtiendo en un portaaviones del Comando Sur en la región.
Para finalizar, sentenció que el tema de la Guayana Esequiba ha sido y es un asunto de altísima trascendencia nacional, por lo que el referendo consultivo que se llevará a cabo es una forma de expresar y dejar en claro nuestra posición.
"El próximo 3 de diciembre el pueblo venezolano, fiel a su tradición democrática, irá a votar para demostrar al mundo que nuestros derechos sobre la Guayana Esequiba son irrenunciables e incuestionables", dijo.