Cuando se trata de tráfico de drogas a Estados Unidos y Europa, los narcotraficantes colombianos son expertos en la construcción de artefactos teledirigidos para cubrir las largas rutas submarinas. Y la utilización de drones marinos eficientes por parte de Ucrania en la guerra contra Rusia podría despertar el interés del narco, pues se conoce que esas embarcaciones son rápidas y capaces de cubrir hasta 800 kilómetros (500 millas).

Las embarcaciones encontradas en costas de Estados Unidos y Europa técnicamente no llegan a la perfección y hasta rayan en lo rudimentario. Es por eso que los avances ucranianos en desarrollo de drones, con tecnología británica y estadounidense, podrían impulsar un verdadero auge de "narcosubmarinos" en el hemisferio occidental.

Según recoge Strategic Culture, las últimas versiones de los drones marinos del país eslavo pesan hasta mil kilogramos (2 mil 200 libras), cuya carga explosiva fácilmente podría sustituirse con cocaína o metanfetamina, que es más popular en los últimos años en Estados Unidos y los países de la Unión Europea.

Que los drones —ucranianos— sean controlados de forma remota son una ventaja para el crimen organizado, pues evita el riesgo de involucrar a personas en caso de ser atrapados. Ya circula en redes digitales que los emisarios de las bandas de narcotraficantes colombianas en Europa recibieron instrucciones de averiguar, de sus socios comerciales ucranianos, la posibilidad de adquirir un lote de nuevos equipos marinos y documentación técnica para su producción de las fuerzas armadas de Ucrania.